Cómo se han cagado en Honduras
Artículo de opinión
escrito por Marcio Silva, estudiante de la Facultad de Ciencias Sociales de la
UNAH, miembro del espacio de construcción política, Democracia de la Calle y de
la Gran Alianza Estudiantil GANE.
“Si se quiere captar los mecanismos de
poder en su complejidad y en detalle, no se puede uno limitar a los análisis de
los aparatos de Estado”. Michael Foucault.
Desde las reformas liberales promovidas por
el poeta Ramón Rosa y el presidente Marco Aurelio Soto, los enclaves bananero,
minero, y cafetalero, la integración del Mercado Común Centroamericano (MCCA), la
inestabilidad política marcada por regímenes militares y golpes de Estado, hasta
la conformación de la democracia electoral y sobre todo con la llegada al poder
por Rafael Leonardo Callejas, existe un patrón común que se logra identificar,
esto es, la injerencia de los grupo de poder, estructuras violentas en múltiples
formas, y por otro lado, las almas que con su bajeza (generalmente los políticos
corruptos y serviles) han entregado nuestro país, como si fuera una bolsa
solidaria, destinada a satisfacer, en este caso, no al estómago que muere de hambre,
sino, para satisfacer los poderes invisibles que mueven sus manos, a través de
sobornos, dádivas y una vida de placeres muy parecidos a una vomitada en plena
madrugada después de injerir el vino de la lujuria.
Es así como limitarnos al mero análisis de
las redes de corrupción del Estado, es limitarnos a una pequeña mirada del cuerpo
desnudo y maltratado, recordando la historia del Noé de la biblia, el cuerpo de
Noé emborrachado
y echado en su necedad fue descubierto por su hijo Cam ese cuerpo son las instituciones
y lo poderes del inexistente Estado de Honduras.
Pero la mirada al cuerpo es aquí mas bien,
descubrir, cuáles son las personas, cuáles son los métodos que se han utilizado
para la descomposición de la vida de los y las hondureños, qué es lo que nos
has llevado a ser parte de un país plagado de tanta corrupción, al colmo, que tenemos a un
presidente ilegal e ilegítimo vinculado al narcotráfico.
En este punto se debe referenciar la influencia
de los medios de comunicación en la primera categoría a desglosar, ahora subordinados
al vocero y poderoso magnate mercenario de la información comunicacional, Eduardo
Maldonado, son un importante aliado para este tremendo crematorio lleno de basura.
Luego los bancos, dirigidos por la familia Atala
Zablah, Guillermo Hueso, y la emergente influencia del Clan Hernández, estos últimos
también en la tercera sección de grupos organizados y criminales que dirigen la
operación masiva de saqueo a Honduras, desde los partidos políticos y sus ejes neoliberales.
La famosa [1] Carta Rolston demuestra el
esquema de pensamiento de estos grupos menos que humanos y con semejanza del
excremento que navega debajo del puente de la Isla “de una manera general,
todas las palabras y pensamientos deben de dar vueltas en torno de estas
palabras: poderío, bienestar material, campos de trabajo (explotación laboral) disciplina
y método (control social). Hay que proceder con sutileza, no exponiéndonos a
ninguna que nos señale o que justifique nuestra pretensión dominadora”.
En efecto, ese fragmento nos ayuda a comprender
la manera en cómo de manera sistemática y perversa, funciona la mente sociópata
de estas articulaciones.
Afortunadamente las redes sociales, han
logrado despertar cierta criticidad en algunos sectores de la población, un pequeño,
pero importante avance para la recuperación diría, gradual de una Honduras dominada
por estos crepúsculos nocturnos.
Nuevamente los medios internacionales ponen
sus reflectores en las cagadas que hace rato amanecen en la democracia de Honduras,
nuestro papel será develar y transformar la forma en la que se han cagado en
Honduras.
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